El Tren de las 3:10

Para hoy quería escribir sobre una película que, como ya va siendo normal en estos tiempos que corren, es otro remake. Aunque he de reconocer que esta vez estoy contento con lo visto, y sinceramente creo que fue una lástima no haberla visto en su día sentado en la butaca de mi cine.

El director James Mongold cuenta con el guión de Halter Welles, y los actores Russell Crowe, Chistian Bale, Peter Fonda, Bretchen Mol, Ben Foster, Dallas Robers y Vinessa Shaw para la adaptación de este Western.

Un granjero que está a punto de perder sus tierras por culpa de las deudas cosechadas, tiene un golpe de suerte cuando uno de los forajidos más buscados es capturado y tiene que ser trasladado a Yuma en el tren de las 3:10, antes de que su banda se reagrupe y vayan a rescatarle. Así que decide escoltarlo hasta el tren y cobrar una suma de dinero suficiente para saldar su deuda antes de perderlo todo. Como es de esperar, no lo tendrá nada fácil ya que el prisionero se lo pondrá muy difícil tanto a él como a los demás escoltas.

¡Que se puede decir de un guión tan bueno que es casi igual de bueno que el original!, valga la redundancia. Creo que solo puedo dar las gracias por haber conseguido un remake tan bueno, donde se disfruta al completo de la historia y los nuevos diálogos realzan aún más la película...

El duelo interpretativo entre Crowe y Bale es de lo mejor que he visto en los últimos años entre dos magníficos actores, donde ambos compiten durante toda la película de forma trepidante para saber quién es el mejor o cual de los dos es el más rápido del oeste. Estos dos astros nos dan un motivo extra para verlos y así juzgar nosotros mismos quien es el ganador...

Pero es que aquí no queda la cosa, pues los compañeros de reparto de estos genios no se quedan atrás y nos regalan una de esas pocas y geniales actuaciones de interpretación de un elenco al completo, haciendo honor al estupendo guión que tienen a su servicio.

Este remake es bastante fiel al original, dentro de unos parámetros, aunque cambia cosas y alarga la historia unos treinta minutos más o menos. Aunque el efecto que tiene es justo el contrario de lo que cabría esperar, ya que no parece más larga si no más corta. Esto es posible ya que la acción es más rápida y trepidante y no dejan que tengas tiempo para el aburrimiento entre escena y escena.

Para redondear el trabajo, la banda sonora que acompaña en todo momento a la película es genial. Y, si añadimos que visualmente es bastante buena, ¿que más se puede pedir en estos tiempos que corren?. Aunque suelen chapucear todas las adaptaciones que tocan, en esta por fin encuentro que han hecho algo más que decente...

Siendo sincero me encuentro con una de esas películas que después de verla preparas un hueco en tu baúl del cine para no perderla, y disfrutar de ella siempre que apetezca un buen western.

Ahora os dejo con este duelo tan interesante; ¡pero acordaros de dar vuestra opinión!

El duo propagonista de este intrepido western